LIMPIEZA CRIOGÉNICA
Es un método de limpieza, a través del cual se proyecta por alta presión, un chorro de hielo seco en forma de pequeñas y compactas partículas (pellets). Los pellets de hielo seco son acelerados por presión de aire comprimido, tal como en las técnicas de chorreado tradicionales.
Lo singular de utilizar hielo seco en un chorro de alta presión como agente de limpieza, es que las partículas de dicho material pasan de estado sólido a estado gaseoso al hacer impacto con una superficie. Esto significa que el área, objeto de limpieza, queda totalmente seca y libre de sustancias secundarias. Como se trata de un proceso completamente libre de humedad y que no crea conducción de electricidad, es posible utilizarlo en lugares donde no hay cabida para los métodos tradicionales.
Al no generarse desechos secundarios, sólo queda la capa residual desprendida de la superficie limpiada, que podrá ser recogida posteriormente del suelo o succionada por aspiradora. Se trata de un proceso que no transfiere substancias ajenas ni deja materia residual que pueda penetrar y quedar depositada, posteriormente, en partes y componentes de la maquinaria.
La limpieza por chorro de hielo seco (CO2) no implica el uso de disolventes o productos químicos tóxicos. Por lo tanto, el usuario no quedará expuesto a vapores o sustancias nocivas durante la tarea ni tampoco en la ubicación donde se trabaja.
También se evita la necesidad de evacuar agua contaminada, como en el caso del hidro-lavado a alta presión.